Reseña - A las chicas les gustan las chicas.

 FICHA TÉCNICA.

Título: A las chicas les gustan las chicas.

Autor: Hayley Kiyoko.

Editorial: Océano.

Sello Editorial: Gran Travesía.

Páginas: 330.

Saga: No.

Costo: $345.00 MX.

Formato: Tapa blanda con solapas.

Sinopsis: Coley es una chica de dieciséis años que se enfrenta al verano en soledad. Obligada a mudarse a un pueblecito de la zona rural después de perder a su madre, no se encuentra en posición de arriesgar su, ya de por sí, frágil corazón. Pero cuando conoce a Sonya, la atracción es inmediata.

A Coley le preocupa no ser digna de ella. Hasta ahora, siempre que se ha enamorado, todo le ha salido mal. Y Sonya nunca ha estado con una chica antes. ¿Qué pasará si no es capaz de ser vista con Coley? ¿Qué pasará si, al abrir su corazón, Coley lo pierde todo?

Ambar se dan cuenta de que cuando las cosas se ponen mal y se ven obligadas a evitar sus sentimientos, son ellas las que salen perdiendo, y que sólo en el momento en el que acepten el amor que más temen y merecen, sus vidas comenzarán a tener sentido.

OPINIÓN PERSONAL.

Este libro lo leí por mi hermana, ello lo compró y yo ya no tenía otra lectura así que dije: ¿por qué no? Además es mi primer libro Girl Love protagonista y... estuvo bien.

Este libro nos relata la historia de Coley, una chica que se muda de la ciudad a un pueblo a vivir con su padre, aquí tendrá que comenzar de nuevo, a conocer a las personas, a hacer amigos, a hacerse cercana a ese hombre que nunca estuvo al pendiente de ella, y a descubrir el amor.

La verdad es que me gustó, aunque sí le encuentro muchas fallas, pero me enfocaré en las cosas positivas, comenzando con que todo el desarrollo de la historia está bastante bien, empezamos en un punto y se ve un claro desarrollo, a mí me ha gustado que no se siente apresurado o forzado en ningún momento, vamos caminando en la historia, aunque se entorpezca, pero por las acciones de los personajes todo se va sintiendo orgánico, como si estuviéramos en verdaderas situaciones.

Por un lado, Coley me ha gustado como protagonista, siento que es una chica con una profundidad de personaje muy, muy grande, y que al final no termina de ser explotada, tiene muchos matices y eso hace que se sienta real, sus problemas, sus conflictos y todo lo que ha vivido a su corta edad la llevan a crear corazas y desarrollar una personalidad que choca, y que a veces conflictúa.

A mí en lo personal me llegó a desesperar, sobre todo porque había ciertas razones relacionadas con su padre y me desesperaba que no lo dejara entrar, que esa coraza estuviera tan bien cimentada y ella fuera testaruda para no fijarse en ciertas cosas, pero al final, aun a pesar de que eso me desesperara, terminé sintiendo que era parte del desarrollo del personaje y estuvo bien.

Entre otros personajes tenemos a Sonya y sus amigos, Sonya es esta chica libre y divertida que también tiene sus demonios y está en la etapa de descubrimiento, y comete muchos errores, me gustó que este personaje en particular lidiara tanto con sus demonios al tener el tipo de familia que tiene, que es diametralmente diferente al de Coley, y eso lo hizo especial, me gustó bastante.

Los amigos de Sonya, que son la gente con la que al final Coley termina relacionándose me parecieron más bien grises, aunque sí se sienten un tanto reales por las interacciones que tienen con estas dos, la verdad es que si alguno hubiera desaparecido a mediados de la historia ni se hubiera sentido tanto tampoco, no son taaaan relevantes, vaya.

Los problemas por lo que atraviesan ambas son bastante buenos, creo que reflejan parte de los conflictos que vive la adolescencia LGBT, en general, y no se siente como si fuera todo el tiempo sufrir y sufrir y sufrir como sucede en otras novelas, siento que este libro más bien cumple con el objetivo de contar una historia y ya, no hay un trasfondo de concientizar acerca de lo mucho que algunas personas padecemos el autodescubrimiento y la exploración, o ncluso el de hacer sufrir a los personajes, todo se siente que encaja y que debe transcurrir porque así pasa en la vida, suceden cosas que nos hacen felices a pesar de estarla pasando mal, y momentos después ese subidón de energía puede venirse abajo por otra circunstancia.

Sí siento que le hizo falta algo, no sé, por ejemplo no me gustan para nada las historias donde los personajes se rebajan y desaprenden todas las acciones que vienen aprendiendo a lo largo de la novela por amor (como en Ocho Lugares que me Recuerdan a Ti de mi esposo Alberto, por ejemplo), y siento que aquí sucede un poco lo mismo, y no, el libro venía con una racha más buena que mala y cuando llegué al final me quedé tipo: "¿really, Coley?", y decidí que lo mejor era imaginarme que ese final no había sucedido.

Además, como dije, hay actitudes que toma Coley con las que no termino de empatizar, es parte del desarrollo del personaje, lo cual aplaudo porque está bien construido porque se siente su personalidad, pero no deja de ser poco agradable para mí; una de estas acciones va relacionada con su padre, chica, las acciones descritas por la autora gritaban a leguas que el hombre necesitaba explicar y contar la versión de su historia, pero Coley estaba tremendamente cerrada a la idea, repito, es comprensible, eso la vuelve más humana, además de una adolescente realista, pero es que hasta porque el hombre le preguntaba si quería un vaso de agua, Coley hacía un santo drama que a veces yo sí estaba tipo: no, no puedo con esto.

Eso y que probablemente comprobé que las relaciones lésbicas suelen ser muy intensas, Coley había momentos en los que se sentía DEMASIADO intensa respecto a Sonya, tipo que apesar estaban siendo amigas y la tipa tenía novio, y la Coley se hacía películas en su cabeza y luego le hacía dramas y yo tipo: "dude, relájate, la morra apenas se está descubriendo", pero repito, cosas de adolescente que hacen de Coley un buen y gran personaje, pero que de todas formas yo estaba desesperado por ello.

En resumen: creo que es un gran libro, me gustó bastante a pesar de algunas de las actitudes de Coley, y de que ese final se sintiera tan fuera de lugar, no me gustó nada de nada y pretendo pensar que nunca ocurrió. Los personajes son bastante buenos, sobre todo Coley y Sonya que se sienten muy reales y bien construidas; en ningún momento el libro se siente apresurado o forzado, todo va encajando y las situaciones se sienten orgánicas para ofrecernos una buena, amena y bonita historia que se siente lineal, con un principio y final bien delimitados.

Puntuación.

4/5.
Estupendo, muy recomendado.