Reseña - Aristóteles y Dante se sumergen en las aguas del mundo.

FICHA TÉCNICA.

Título: Aristóteles y Dante se sumergen en las aguas del mundo.

Autor: Benjamin Alire Sáenz.

Editorial: Planeta.

Sello Editorial: -.
Páginas: 468.

Saga: Aristóteles y Dante 2/2.
Costo: $368.00 MX.
Formato: Tapa blanda con solapas.
Sinopsis: EN ARISTÓTELES Y DANTE DESCUBREN LOS SECRETOS DEL UNIVERSO CONOCIERON EL AMOR.

Ahora, deben descubrir cómo cuidarlo y construir una relación en un mundo que parece desafiar su existencia. Ari ha pasado toda la preparatoria escondiendo su verdadero yo, manteniéndose callado e invisible. Pensaba que su último año sería igual, pero algo en él cambió cuando se enamoró de Dante. Ahora hace cosas que jamás pensó: tiene nuevos amigos, confronta a cualquier tipo de bully y no se queda callado ante nada. Y siempre a su lado está el soñador y perspicaz Dante, quien lo mismo consigue sacarlo de quicio que hacerlo suspirar.

Los chicos están decididos a abrirse camino en un mundo que no los entiende, pero cuando Ari sufre una repentina y devastadora pérdida, sabe que deberá luchar como nunca para lograr la vida plena y feliz que siempre soñó.

Otros libros del autor ya reseñados.

 OPINIÓN PERSONAL.

*Puede contener spoilers del primer libro*

Esperé por mucho tiempo poder leer esta secuela, cuando leí Aristóteles y Dante Descubren los Secretos del Universo yo era un crío, y me sentí tan identificado, amé la historia, amé las palabras, amé a los personajes, es uno de mis libros favoritos que no salen de mi corazón, entonces, el anuncio de este segundo y su publicación casi inmediata al español me hizo el más feliz. Tengo ciertamente algunos puntos que debatir, pero en general puedo decir que he quedado satisfecho.

En esta secuela, Ari y Dante mantienen una relación bonita y casi perfecta, están en las primeras etapas del enamoramiento, pero debido a la época y a las situaciones que viven, ahora deberán aprender a mantener esa relación, a protegerla y a convivir con el otro de una forma diferente a lo que es la amistad. Al mismo tiempo enfrentarán cosas como los cambios, el crecimiento y las pérdidas, ¿el amor realmente puede llegar a ser tan fuerte para superar tantos obstáculos?

Primero que nada, debo decir que la pluma de Benjamin definitivamente me encanta, tantas frases, tantas lecciones disfrazadas de metáforas, definitivamente no he encontrado otro autor que transmita tantas emociones a través de las palabras, y eso me gusta mucho, le da mucho puntos al libro, definitivamente.

Vamos a comenzar por lo bueno, que es casi todo, los personajes, no recordaba muy bien la construcción que habían tenido en el primer libro, era como que llegué a este segundo recordando lo básico: Ari el introvertido que se pelea, Dante el extrovertido que no tiene tanta facilidad para ocultarse y pasar desapercibido. Además, también recordaba vagamente sus relaciones familiares, pero en general más datos o detalles no tenía, por lo que al principio pensé que quizá sería una mala idea leerlo sin haber releído antes el primero, cosa que no fue cierta.

Los personajes tienen una esencia bien, bien marcada, que me hizo tener flashbacks inmediatos del libro anterior, además el autor cuenta ciertas cosas claves que ya sucedieron y yo estaba "sí, ya lo recuerdo", por lo que eso le suma muchos puntos, no necesité releer el anterior para comprender y volver a amar a estos personajes.

Aristóteles tiene unos cambios impresionantes, al inicio sigue siendo el mismo, pero me ha encantado totalmente el crecimiento tan enorme y las lecciones que aprende a lo largo de esta segunda novela, como el amor y Dante lo llegan a cambiar, que en la vida real sí suele suceder, y como poco a poco se va abriendo y transformando cierta parte de su personalidad, se nota un punto de partida y uno de llegada bien definidos en este personaje. Además, es el narrador de la novela y eso me hizo sentirlo más cerca.

Me ha encantado como es que Benjamin retrata a la perfección todos los procesos de aceptación, de destrucción, de ansiedad y posible depresión que se tienen al momento de salir del clóset o de comenzar a asimilar quién se es en realidad, eso es algo por lo que este libro me ha gustado más de lo que parecía al principio, me identifiqué totalmente con Ari y toda esta parte de su descubrimiento y de sus propia aceptación, él sabe que su familia y amigos ya lo aceptaron o al menos lo están intentando, lo están apoyando, sobre todo, pero en su interior todavía hay algo que está incómodo, que se detesta a sí mismo y que se niega a ser quien es.

Yo pudiera contar por experiencia propia que viví una situación similar, y por eso no deja de gustarme mucho esta secuela, creo que todo este libro es un viaje diferente al primero, en el primero vimos forjar una relación de amistad que acaba con el inicio de una relación, un final bonito vaya, pero definitivamente faltaba más, comprendo totalmente porqué Benjamin dice que faltaba algo, porque sí lo hacía, y es todo este asunto de descubrirse y de que la gente se de cuenta de que el camino después o a veces incluso antes de salir del clóset no es para nada sencillo después de vivir tanto tiempo rodeado de personas que dicen que lo "normal" no es lo que sientes ni lo que eres.

Aristóteles se ha convertido en uno de mis personajes favoritos de la vida, y tras este segundo libro lo tengo muy cerquita de mi corazón, durante todo el libro me daban ganas de abrazarlo y de decirlo: "yo te entiendo, pero todo va a mejorar, lo prometo", no sé, no lloré durante el libro, sorprendentemente, pero motivos, escenas y frases no faltaron.

Por otro lado, en este segundo libro, Benjamin explora diferentes personajes, pero Dante... tengo un pequeño problema con él, y es que siento que parte de mí también se refleja en él, y es quizá esa parte que no termina de gustarme de mi mismo, como lo impulsivo y temperamental, no noté un gran cambio en Dante, al contrario, creo que el Dante que comenzó el libro se mantuvo durante todo él y al final incluso hubo un ligero retroceso, que sé que no es así, pero no sé, siento que no fue la forma ¿saben?

Por otro lado, los padres tanto de Ari como de Dante son una joya, los amé, ojalá todos los padres del mundo fueran como ellos, pero pues no es así, siento que con ellos se refleja todo este asunto de los padres que quisiéramos tener, que apoyan incondicionalmente, que respetan tus decisiones y no las ven como "algo de adolescentes", digo porque a mí me pasí, además también me identifique con la madre de Ari por la profesión, soy educador además de lector y escritor compulsivo, y conecté con ella de una modo diferente a como lo hice con Ari y Dante.

Cassandra, Susie y Gina llegan a ponerle sabor a las cosas y ese toque femenino y feminista que tanta falta hacen en los libros actuales, me gustó mucho que en ellas pude ver reflejados a mis amigos de la vida real, pedacitos de sus personalidades y me gustaron muchísimo, no son personajes tan profundos, pero tampoco se quedan planos, son maravillosas y me hubiera gustado que hubieran tenido más participación en el primer libro para que en este segundo tampoco se hubieran sentido como introducidas a la fuerza o apresuradas en sus interacciones con Ari.

Este libro tiene uno de mis clichés favoritos: la familia encontrada, ya saben que todo lo que tenga que ver con este tópico donde unos marginados/desconocidos/simples amigos, forman lazos tan fuertes y se aman incondicionalmente, son leales y sinceros, me puede, me puede porque es algo que viví y que sigo viviendo y es precioso, de verdad contar con gente que no está liga a ti por sangre o parentescos, pero que aun así deciden estar, quedarse, acompañarte y sentirse orgullosos de ti, como si realmente fueran familia, me puede muchísimo. Así que esto también le sumó muchos puntos.

El desarrollo de la historia en general me gustó, siento que Benjamin sabe cómo iniciar y terminar historias (aunque aquí falló un poquito, peor hablaré de ello más adelante), el inicio, el nudo y el final están claramente definidos, todo el libro es un viaje increíble y lleno de arcoíris y felicidad (dentro de lo que cabe) donde acompañar a Ari y Dante en el descubrimiento de sus nuevos sentimientos y deseos me hacían sentirlos como unos hermanitos, primero, sobrinos e incluso alumnos a los que me sentía muy orgulloso de acompañar.

El autor cierra muchas tramas, la mayoría de hecho, como el asunto con el hermano de Ari que ha sido algo que me ha gustado mucho, al principio lo vi como innecesario, pero conforme avanza la novela y se va viendo la transformación y cambios que va teniendo Aristóteles, lo tomé como algo realmente necesario para poder llegar al final del libro.

Ahora sí, lo negativo y lo que me hizo no ponerle las cinco estrellas que el primero sí alcanzó: como dije, Dante, siento que sí fue un pequeño problema para mí porque a pesar de poder considerarse como protagonista, no tuvo tanta presencia como me hubiera gustado, así como tampoco tuvo tanto crecimiento y desarrollo, tiene una construcción y personalidad bien marcadas, pero ¿dónde está el aprendizaje y el cambio? Ari lo tuvo, incluso puedo decir que algunos secundarios también lo tuvieron, pero Dante no y eso me llega a conflictuar un poco.

Además, ya le estoy tomando la medida a Benjamin y estoy encontrando cierto patrón en sus novelas, y ese es que todos sus libros, siempre, en al menos todos los que he leído, tiene que haber muertes repentinas e innecesarias, digo, así es en el mundo real, estamos y de repente ya no, por cualquier situación, pero creo que si todo va bien y todo pinta excelente, llegar y matar a cuatro personajes de la nada "por desarrollo de otros personajes" no es el caso, no es un libro de ciencia ficción, no hay guerra, no hay apocalipsis, entonces estas muertes podrían pasar como un poco injustificadas, porque repito, muchas veces el "es por hacer crecer al protagonista" no funciona, y este es uno de esos casos.

Me pareció totalmente innecesario ese suceso, todo iba bien, el libro estaba por la mitad y todo pintaba para ser una novela que tendría un final que me llenaría el corazón y me haría llorar a mares, pero no fue así, de repente todo cambia, Ari tiene un giro inesperado (que al final terminó siendo para bien, pero anyway), y literalmente fue de repente, al capítulo actual todo iba color de rosa, pintaba felicidad para Ari, y comenzando el siguiente, sin alguna otra explicación ¡pum! ya, sufre Ari, sufre.

Este realmente es un patrón que sí hay en sus novelas, hasta ahora he leído 4 y en las 4 sucede lo mismo, los personajes principales tienen que sufrir una pérdida sí o sí, porque si no, no es un libro de Alire Sáenz.

Además, otra cosa que no me ha gustado es el final, y no que no me haya gustado, gustado, sino que más bien lo sentí... como explicarlo, como fuera de lugar, apresurado, inesperado, no sé, podría definirlo de muchas maneras, pero no siento que fuera el adecuado, hubiera preferido que terminara diferente, no era necesario ese viaje, desde mi punto de vista, porque no siento que sea totalmente realista, de que existen personas locas que viajan por amor, las hay, pero no es tan común, o al menos no es algo que yo haría, en definitiva. No conecté con ese final y lo sentí simple, sin más, después de tanto aprendizaje, tanto crecimiento, tanta pérdida, la graduación y de más, ¿terminar así? No señor, no me ha convencido.

Creo que sí hay ciertos aspectos y detalles que no eran necesarios, y que me han terminado decepcionando y dejándolo solo en 4 estrellas, el final es uno de ellos, definitivamente.

En resumen: creo que es una secuela necesaria, no por el hecho de vendernos la idea de que Ari y Dante serán felices para siempre, sino que todo este tema y viaje de la aceptación es muy importante, no solo es salir del clóset y ya está, muchas personas después de esto vivimos todavía una guerra interna durante muchísimo tiempo y verla representada es precioso y se agradece. Digo, yo ya la viví para este punto, pero me hizo recordar ¿saben? Y creo que puede ayudar a muchos jóvenes que todavía no lo han pasado. Tiene mi cliché favorito planteado de una forma preciosa, un desarrollo impresionante en el personaje principal (Aristóteles), aunque sí me debe algunas cosas como el desarrollo y más protagonismo de Dante, sucesos y pérdidas que me parecen innecesarias y que ya forman un patrón de estilo del autor, y el final insípido, esa era la palabra, no me deja sabor, ni bueno ni malo, es un final muy X, desde mi punto de vista. Pero, a pesar de ello, llevaré esta bilogía muy cerquita de mi corazón.

Puntuación.

4/5.

Estupendo, muy recomendado.